Esto es lo que les sucede a los pulmones, el cerebro, los riñones, los dientes y el estado de ánimo cuando bebes gaseosa dietética
Muchas personas comúnmente consumen gaseosa de dieta,
creyendo que les ayuda a perder peso y que es una opción mucho más segura que
otras gaseosas.
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| IMAGEN: COROFLOT |
Susan E. Swithers, Ph.D., profesora de ciencias
psicológicas y neurocientífica del comportamiento en Purdue, sostiene que
debemos limitar la ingesta de todos los edulcorantes, incluyendo edulcorantes
sin calorías.
Revisó estudios recientes que examinaron los efectos de la
soda dietética y descubrió que el 30 por ciento de los adultos estadounidenses
y el 15 por ciento de los niños estadounidenses consumen edulcorantes
artificiales, como el aspartamo, la sucralosa y la sacarina. Ella dice:
"Hay mucha presión del sector de la salud pública para
encontrar soluciones para contrarrestar el aumento de la obesidad y las
enfermedades crónicas, y hay mucho dinero y negocios en juego para la industria
alimentaria a medida que se desarrolla y promueve estos productos.
Las bebidas se están convirtiendo en temas políticos, ya
que los líderes gubernamentales y los políticos buscan la regulación y la
imposición para limitar su disponibilidad y consumo, pero la mayoría de estas
medidas excluyen los refrescos dietéticos porque son percibidos como
saludables.
Cuando se trata de tomar decisiones políticas, es más
importante que nunca que se considere la ciencia y que el público entienda lo que
la ciencia dice para ayudarlos a tomar las mejores decisiones sobre su salud
".
Aparentemente, los edulcorantes artificiales confunden la
capacidad natural del cuerpo de manejar las calorías basadas en probar algo
dulce, y la gente consume los alimentos dulces en exceso, llevando a un riesgo
aumentado dos veces del síndrome metabólico.
La investigación ha encontrado que la gaseosa dietética conduce
a numerosos problemas de salud, incluyendo:
Diabetes tipo 2 y síndrome metabólico
La revista Diabetes Care publicó un estudio de 2009 que
mostró que el consumo de gaseosas dietéticas está relacionado con un 36 por
ciento más alto riesgo de síndrome metabólico y un 67 por ciento aumentó el
riesgo de diabetes tipo 2.
Depresión
La ingesta de más de 4 latas de gaseosa al día está
relacionada con un riesgo 30 por ciento más alto de depresión, mientras que el
consumo de 4 tazas de café proporciona efectos protectores y reduce el riesgo
de depresión en un 10 por ciento.
Pulmones comprometidos
Estas bebidas aumentan el riesgo de desarrollar síntomas de
asma y de EPOC. Según un estudio australiano, el 13,3 por ciento de los
participantes encuestados con asma y el 15,6 por ciento de los pacientes con
EPOC consumían más de 2 vasos de gaseosa al día.
Daño en el riñón
Expertos en Harvard examinaron a personas que consumieron
bebidas gaseosas por más de 20 años y mostraron que el consumo de la gaseosa
dietética a largo plazo conduce a una reducción del 30 por ciento en la función
renal.
Enfermedad cardiovascular
Un estudio realizado en la Universidad de Miami y en la
Universidad de Columbia involucró a más de 2.000 adultos durante 10 años y
encontró que aquellos que consumían estas bebidas tenían un mayor riesgo de
ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares y tenían más posibilidades de
morir debido a enfermedades del corazón.
Un Cerebro menos protegido
Se ha encontrado que el aspartamo, un edulcorante
artificial común en estas bebidas, daña el sistema de defensa antioxidante del
cerebro, por lo que su consumo a largo plazo causa un desequilibrio en el
estado antioxidante / pro-oxidante en el cerebro, principalmente a través del
mecanismo que contiene Ee sistema dependiente de gluten.
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