Una buena alimentación en la lucha contra el cáncer

El cáncer es un grupo de enfermedades caracterizadas por la proliferación de células y
también diseminación de los tejidos. Su desarrollo compromete muchos cambios graduales y pequeños en las células.
El cáncer puede ocurrir cuando el material genético de una célula cambia, también exponiéndose a contaminaciones; como el humo del tabaco, radiaciones; expuestos a la luz solar y un mal estilo de vida. Eso provoca que las células crezcan fuera de control que se dividen demasiado rápido y no tengan una muerte normal.
Cómo evitar el cáncer
La prevención del cáncer debe manifestarse a lo largo de la vida, usando estrategias como; cambiar el estilo de vida, comenzando a variar en la dieta, evitando el exceso de carnes rojas, reduciendo el consumo de alcohol, aumentando los consumos de frutas y la actividad física. Estos son los pilares de protección para prevenir algún tipo de cáncer.


Papel de la alimentación en la prevención
Algunos alimentos gracias a sus propiedades pueden hacer que el cuerpo esté lo más sano posible, fortalecer la barrera inmunitaria y mantener el riesgo de tener cáncer lo más bajo posible.
Consumo de hortalizas: zanahorias, tomates, verduras de hojas verdes; son una buena fuente de fibra, vitaminas, minerales y fitonutrientes.
Brocoli; su composición es rica en sulforafano, vitamina C y betacaroteno; grandes antioxidantes son agentes muy potentes para combatir el cáncer, su cantidad varia tres a cinco porciones ingeridas por semana.
Arroz integral: Es una semilla, contiene inhibidores de la proteasa, que parece que retrasan la aparición de cáncer.
Tomate: El consumo del tomate beneficioso por su contenido de licopeno y la tomatina es un poderoso antioxidante que evita que procesos de degeneración celular e incidencia de patologías cancerosas como del pulmón, próstata y tracto digestivo.
Zanahoria: tiene beta-Caroteno que fortalece el sistema inmunológico y contiene antioxidantes.
Linaza: Esta semilla contiene componentes anti-cancerígenos, uno de esos agentes es la Lignina. Es uno de los mejores granos integrales, más completos en su composición, conocido como un protector contra formación de tumores.
Naranja: El ácido ascórbico o vitamina C puede detener el crecimiento de tumores cancerosos, por su cantidad de peróxido de hidrógeno que es capaz de matar las células cancerosas, según lo comprobó un grupo de investigadores de la Universidad Johns Hopkins, de Estados Unidos (EE.UU.).
Uva: contiene resveratrol, efecto protector que bloquean los agentes cancerígenos y previene la carcinogénesis.
Té verde: El té verde contiene sustancias químicas conocidas como polifenoles, antioxidantes, que pueden inhibir la proliferación celular y otras como las catequinas que inhiben la angiogénesis. Pueden prevenir y actuar en cáncer de estómago, colon, próstata y mama.



Escrito por Fiorella R., Apasionada por el estilo de vida saludable.

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